¡Descubre cuál es tu tipo de piel!

Te has dado cuenta que no todos los rostros envejecen de la misma manera, esto depende por el tipo de piel, hábitos y factores cronológicos. El sol, fumar y beber alcohol son algunos factores externos que no favorecen el cuidado de nuestra piel. Sabemos que para que nuestro rostro luzca sano y sin imperfecciones es necesario cuidarlo diariamente de acuerdo a nuestro tipo de piel. 

Si estas en el proceso de comenzar a cuidar de ella continua leyendo porque a continuación te diré cuáles son los diferentes tipos de piel y sus características para que puedas identificar cual es la tuya. 

Piel normal: Esta piel esta en equilibrio. No se observa mucha grasa ni demasiada resequedad. A pesar de eso es importante cuidarla porque con el paso del tiempo puede evolucionar a una piel seca. 

La piel normal es:

  • Suave al tacto y sus poros son poco visibles.            
  • Es una piel sin imperfecciones visibles.
  • Es una piel hidratada y se adapta bien a distintas temperaturas y humedad. 

Piel seca: Esta piel es áspera ya que es incapaz de retener el agua en su interior. La piel seca no cuenta con las grasas necesarias para poder retener la humedad. El estrés, la actividad física y el calor pueden potenciar este proceso. 

La piel seca es:

  • Áspera al tacto.
  • Tez apagada u opaca, incluso con manchas rojas en la piel.
  • Pequeños rasgos prematuros de envejecimiento como líneas de expresión.
  • Se enrojece con facilidad. 

Piel grasa: Al ser más gruesa y resistente, la piel grasa tiene menos arrugas, pero los poros son un problema para ella, ya que están más dilatados y visibles. En muchas ocasiones aparece el acné, comedones en la cara, cuello, hombros, espalda y pecho. La limpieza facial diaria es vital para disminuir los poros y la aparición de pequeños granitos o lesiones que puedan dejar manchas en la piel. 

La piel grasa es:

  • Brillosa en todo el rostro.
  • Presenta puntos negros o espinillas.
  • Sus poros están dilatados y ensanchados.
  • Su textura es irregular, no uniforme.

Piel mixta: Tiene los mismos problemas que la piel seca y grasa, es una mezcla de ambas. Se debe tratar la sequedad de la zona seca y al mismo tiempo controlar la grasa de la zona grasa. La piel mixta suele ser la común.

La piel mixta es:

  • Brillosa en la zona T es decir, frente, nariz y barbilla. 
  • En las mejillas y en la sien suele tener una textura tosca, una piel seca.
  • Predominan los poros dilatados en el rostro.

Piel sensible: Este tipo de piel suele presentar rojez, por lo que debes escoger muy bien los cosméticos que utilizas ya que reacciona fácilmente antes cualquier componente. Es importante que acudas con un dermatólogo para que indique que productos son adecuados para tu cuidado. 

La piel sensible es:

  • Delicada, se irrita con facilidad con productos cosméticos y aparece enrojecimiento, picor o ardor.
  • Alteraciones ante cambios de temperatura o clima.
  • Aparecen lesiones espontaneas o sin causa alguna.

La manera en la que luce y envejece tu piel dependerá mucho del cuidado que le brindes. Una vez que hayas identificado el tipo de piel que tienes el segundo paso es comenzar a cuidarla, puedes encontrar productos para el cuidado de tu piel en las farmacias y supermercados. En las etiquetas del producto indica para que tipo de piel es, por ejemplo: Exfoliante para piel grasa. 

Ahora que ya conoces cuál es tu tipo de piel comprar un producto dermatológico no será un problema para ti. Si tu piel presenta un caso grave como acné te recomiendo acudir con un especialista para que pueda darte un tratamiento y seguimiento adecuado. Espero que la siguiente información haya sido de gran ayuda y comiences a cuidarla, recuerda que cara solo hay una. ¡Hasta la próxima!   


27 ene 2021 - Por: Karla de la Rosa

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